Salvos por gracia, no por obras

Sep 21, 2025    Tali Victoria

En Efesios 2, Pablo nos recuerda que antes estábamos muertos en nuestros pecados y lejos de Dios. Pero en Cristo hemos recibido una nueva identidad: ya no somos lo que éramos antes, ahora somos libres, parte de la familia de Dios y su morada.

La salvación es un regalo de gracia, no el resultado de nuestras obras. Eso significa que no hay lugar para el orgullo espiritual en la iglesia: todos venimos de lo mismo, de estar perdidos y sin esperanza.

Jesús es nuestra paz. En la cruz nos reconcilió con Dios y también entre nosotros, derribando los muros que nos separaban.

👉 Pregunta para reflexionar: ¿Qué paredes sigues levantando que Cristo ya derribó?

Vive cada día recordando que en Jesús ya tenemos toda bendición espiritual.

En pocas palabras:

Somos salvos por gracia. En Cristo tenemos una nueva identidad, paz con Dios y una familia a la cual pertenecer.